Incertidumbre económica. ¿Certidumbre política?

El gobierno libertario imaginaba a esta altura del año político, con renovación parlamentaria en octubre próximo, tener domesticado el índice de precios. No pareciera ocurrir de ese modo. En mayo se festejó tempranamente un 1,5% de crecimiento de los precios al consumidor, que subieron al 1,6% en junio y al 1,9% en julio. Todo indica que para agosto el dato podría escalar, especialmente en el rubro alimentación, con dificultades para asegurar un clima de abatimiento de la inflación, el principal problema a resolver que demanda la sociedad y que explicaría el ascenso del gobierno de la ultraderecha en la Argentina. Para ello y desde una lógica de ortodoxia monetarista se profundiza la política contra la mejora de los ingresos populares y el control del tipo de cambio. El efecto inmediato es la baja de la capacidad de compra de la mayoría de la población que vive de ingresos fijos: salarios y jubilaciones. Con la contención del tipo de cambio pretende estimular actividades financieras en moneda local, para lo que incrementa la tasa de interés vía la política del Banco Central, agravando la situación del costo financiero para la producción. Resulta un agravante en el deterioro de la actividad económica del sector privado que no participa del sector especulativo financiero o del núcleo de acumulación primario exportador concentrado en el agro, la energía, o la minería. Todo se hace en aras de contener los precios y ganar consenso para continuar con el ajuste y la regresiva reestructuración del capitalismo local, lo que quiso y no pudo la dictadura, ni los 90, ni el macrismo, aun cuando sembraron el camino para el consenso electoral de este tiempo, más allá del crecimiento del ausentismo por descontento. Acumulación y distribución regresiva Vale resaltar que el sector financiero y ese núcleo de la acumulación capitalista define datos importantes del crecimiento económico, en torno al 5,5% anual, según el FMI. Son datos que están por encima del promedio pronosticado para la región latinoamericana (2%) y mundial (3%), con escaso impacto en la distribución del ingreso y de la riqueza, pero efectivo a la hora del argumento propagandístico del ajuste y la regresiva reestructuración del capitalismo local. Argentina crece, pero no distribuye, por lo que existe una fuerte concentración de ingresos y riqueza, en simultáneo con una dinámica de extranjerización de la economía local, coherente con un empobrecimiento estructural de millones de personas. De ahí la importancia por la argumentación en la disputa del consenso electoral, en tiempos que el gobierno de la ultraderecha pretende crecer en representación parlamentaria. El rechazo a la política gubernamental se afirma en la negación, sin instalar nuevos imaginarios de propuestas que no signifiquen el retorno a lo existente previamente al ascenso al gobierno de los libertarios, que afirmaban, además, el modelo productivo y de desarrollo de esa acumulación sesgada al agro, la energía y la minería. Resulta interesante la predica en el rechazo a la política del libertario y sus cómplices, a veces disfrazados de oposición, especialmente en horas en que se discute el veto a políticas esenciales como el caso de los subsidios por discapacidad y las actualizaciones, mínimas, a jubiladas y jubilados. Elecciones en ciernes Las alianzas y las listas de candidatos para octubre ya están cerradas y no hay novedad significativa que modifique el marco ideológico político del debate sobre el rumbo económico del país. El gobierno insiste en su lógica de austeridad por el ajuste fiscal, sostenido con el endeudamiento favorecido por el FMI y el gobierno estadounidense detrás del organismo internacional, más un crecimiento sostenido de la deuda en moneda local con altas tasas de interés en un tiempo de rentabilidades disminuidas del sector privado. La oposición no termina de presentar un rumbo más allá de la crítica a la ofensiva libertaria por el ajuste y la regresiva reestructuración. Es un tema central para motivar el entusiasmo de una mayoría de la población que optó por la propuesta libertaria ante los límites de las políticas previas. No alcanza con el rechazo al ajuste. La demanda es por otro rumbo que genere consenso y supere los límites que el “progresismo” mostró en la región, tal como se visibiliza por estas horas en Bolivia. Estas políticas previas mantenían el modelo productivo propuesto desde la dictadura genocida, potenciado en los 90 y por el macrismo en tiempos recientes. No da lo mismo quien se alce con mayores votos o legisladores, pero es un límite la continuidad de propuestas que verbalizan una crítica al ajuste, pero reproducen la lógica de acumulación del capitalismo local. Más allá de lo dicho, hay que destacar que desde la izquierda se presenta la “novedad”, con la apertura de las listas a otras expresiones partidarias. Es lo que ocurre con “Vientos del Pueblo. Frente por el poder popular”, un conjunto de agrupamientos políticos por fuera de la hegemonía trotskista del Frente de Izquierda y los Trabajadores Unidad, el FITU. Falta precisar cuánto amplía electoralmente esa apertura de la izquierda a estos grupos políticos, con matices respecto al FITU en la caracterización de la situación regional y mundial, con interesante inserción social y en el conflicto y con relativa capacidad de interacción, en algunos de ellos, con sectores asociados a la identidad del peronismo. Lo relevante y a destacar en la coyuntura es la búsqueda de una mayor articulación de la izquierda, en un intento por superar cualquier vocación testimonial y disponerse a la disputa de gobierno y de poder. Es un tema a explorar, que puede contribuir a extender la influencia política lograda por los principales dirigentes y organizaciones del FITU. Un logro asociado a la persistencia en la unidad, pese a las diferencias públicas de los componentes. Con esa propuesta de ampliación de la unidad de la izquierda, asociada a una voluntad por la unidad de acción más allá de lo ideológico, facilita la posibilidad de contrarrestar la fragmentación en el movimiento popular. Economía y política Las tensiones en la economía agregan incertidumbre a la realidad local, aun cuando todo parece no modificar las correlaciones de fuerzas construidas desde el ascenso al gobierno de Milei. Sin embargo, el descontento social y el crecimiento de las protestas constituyen un interrogante sobre la realidad política del presente y el futuro cercano. Las incertidumbres económicas pueden incidir contra las aparentes certidumbres de la política, aun cuando el gobierno sume legisladores en el congreso nacional y lo celebre como un triunfo, que puede ser pírrico, tal como le sucedió al macrismo luego de ganar el medio término en 2017. No solo debe contabilizarse lo institucional o disputa de votos para pensar la política, sino y fundamental en la tradición de la Argentina, importa la organización y lucha del movimiento popular, base material para pensar en términos de alternativa política. Vale señalar que en política no hay conclusión definitiva y el curso puede definirse desde imponderables, más allá de elecciones, que involucran la voluntad política de la sociedad. Buenos Aires, 18 de agosto de 2025

Pensar y actuar para la emancipación social. Actuar pensando y pensar actuando para la vida.

LA PONENCIA ABAJO FUE PRESENTADA AL PRIMER ENCUENTRO INTERNACIONAL "CEREBRISTA" (El cerebro vs la inteligencia artifical) y fue leida en la sesión del sábado 9 de agosto del 2025. Pensar y actuar para la emancipación social Actuar pensando y pensar actuando para la vida Por Julio C. Gambina La historia larga de la hominización nos trajo hasta el presente, con prolongación de la expectativa de vida y en simultáneo amenazas sobre la vida social y natural. Son amenazas propias de nuestra historia de construcción como especie, de trayectos individuales y colectivos, que cada generación necesita reconsiderar para evaluar críticamente el presente y desafiar el porvenir. La historia de la humanidad es cuento largo, desarrollada en un proceso de trasformación de la vida social y de la naturaleza, que se recrea con cada generación en disputa de cosmovisiones sobre el ser y el deber ser en sociedad y en armonía con la naturaleza. Por todo eso hay que pensar y al mismo tiempo actuar para hacer realidad cosmovisiones del “vivir bien”, o el “buen vivir”, de la tradición ancestral andina en nuestro tiempo. No se trata de volver en la historia, sino de construir colectiva y de manera consciente nuestra historia. Actuar pensando y pensar actuando es un desafío de época, en tiempos de progreso y devastación, propios de la sociedad capitalista, de inteligencia artificial y contaminación, de robótica y toxicidad, de avance y retroceso. Hoy se impone al mundo la razón de la “sin razón”, que es la de la desigualdad creciente sustentada en la explotación de la fuerza de trabajo y el saqueo de los bienes comunes, al tiempo que se amenaza a la vida de los seres humanos y de la naturaleza. También existe la solidaridad, la cooperación, el comunitarismo, la autogestión, la amistad, la lucha y la organización popular y el humanismo internacionalista en contra de la guerra, el racismo y toda forma de discriminación. La violencia, el racismo, la discriminación, la guerra, la militarización, la especulación, la destrucción social y natural es la lógica que impone el privilegio de una sociedad monetario-mercantil sustentada en el lucro, que concentra la riqueza y el poder en una minoría en contra de la abrumadora mayoría. Es una dinámica que estimula el capitalismo delictivo, del tráfico de drogas, de armas o de personas. Es tiempo de crítica Resulta entonces un desafío de crítica y transformación para la mayoría, en tanto procesos dialecticos, individuales y colectivos. A la hegemonía del poder se le opone la contra hegemonía del contrapoder, de los de abajo contra los de arriba, de los subalternos a los que dominan. Es la razón y la lógica del poder y los poderosos la que condiciona y limita la creatividad humana para una vida de plenitud en la satisfacción de las necesidades materiales y espirituales de la humanidad y el hábitat. Ante el control propietario de la tecnología y los mecanismos de manipulación ideológica, de la conciencia y la cotidianeidad, resulta imprescindible el aliento y estímulo a la creatividad superadora del orden jerarquizado del dinero, del intercambio basado en el lucro, la explotación y el saqueo. Es una cuestión de recuperación ética en la sociedad. Sustentamos una creatividad para la vida que recupere la memoria de la hominización y la existencia en, para y por la comunidad, en contra de todo tipo de control definido por poderes transitorios que reproducen las condiciones de la violencia e inequidad actuales. Una recuperación de la cultura de la ética, de una cultura en sentido antropológico, relativo a lo cultural como creación humana, más allá del arte y la literatura, la música y la fantasía creativa, concretada en la materialidad de la cotidianeidad, en la alimentación y los derechos humanos en sentido integral. La historia en nuestra América está llena de aspiraciones irresueltas que marcan posibles caminos: desde la lucha anticolonial de los pueblos originarios; de la experiencia de Haití albergando la primera revolución contra la esclavitud triunfante en la historia; de las luchas contra el colonialismo y por la independencia, hasta el intento cubano de un nuevo orden socioeconómico, a las expectativas esperanzadas de la emancipación social que anida en la larga lucha de los/as trabajadores/as, los feminismos populares, la lucha ambiental, entre muchas reivindicaciones que sustentan los pueblos en nuestra región y en el mundo. Son experiencias, todas boicoteadas por el poder, construidas como imaginario por la emancipación en la región, que se potenciaron al comienzo del Siglo XXI y sembraron esperanzas más allá del continente. El problema es que el poder global no resigna sus cuotas de ganancia y acumulación para la dominación, lo que provoca la multiplicación recurrente de las experiencias sociales de carácter popular para asumir un programa permanente por la emancipación social como esperanza de los pueblos para el presente y el futuro. La emancipación como asignatura pendiente demanda pensamiento crítico y acción transformadora, como parte de una iniciativa colectiva que estimule prácticas de sujetos conscientes en rumbos a favor de la vida social y natural. Buenos Aires, 21 de julio de 2025

Los datos de Milei no coinciden con la realidad

En la cadena nacional del 8/8/25 del presidente de la Argentina: “Medidas para amurallar el déficit cero y la política monetaria del Gobierno” (en: https://www.casarosada.gob.ar/slider-principal/51044-cadena-nacional-del-presidente-de-la-nacion-javier-milei-medidas-para-amurallar-el-deficit-cero-y-la-politica-monetaria-del-gobierno) se señalan datos falaces. Relata Milei que “La inflación se ha desplomado, pasando de una tasa interanual del 300% cuando asumimos a una tasa interanual del 25%”. Los datos del INDEC invalidan el relato presidencial. Ocurre lo mismo con las referencias a la reducción de la pobreza, la indigencia y los salarios del sector privado. Son referencias para criticar la asignación de recursos parlamentaria a legislación sobre salud, discapacidad y jubilaciones, exagerando el impacto en el presupuesto público. Inicia Milei su cadena nacional recordando que el mandato del voto en 2023 era para terminar con la inflación y hacer crecer la economía argentina. Para confirmar ese rumbo alude a una inflación interanual del 300% al asumir el gobierno en diciembre del 2023. Veamos los datos difundidos por el INDEC. Discurso y realidad La inflación interanual a noviembre 2023 era de 160,9% y en diciembre de ese año alcanzó los 211,4%, ya bajo gobierno Milei; para luego crecer sucesivamente a 254,2%, 276,2%, 287,9% y 289,4% para abril del 2024. A posteriori empieza la baja interanual hasta el último dato disponible, del 39,4% a junio del 2025. Este último registro difiere del relato presidencial que la ubica en 25%. Es verdad que la inflación está en baja, para el registro interanual, desde abril/mayo del 2024 respecto de la escalada de precios bajo el gobierno anterior (160,9% a noviembre del 2023) y exacerbada desde la asunción de Milei en diciembre 2023 (211,4%), devaluación mediante que llevó el tipo de cambio de un dólar por 400 pesos a uno de 800 y ahora en torno a los 1.320. Digamos que a partir de ahí se presenta la tendencia a la baja de los precios, más allá de discutir cómo se baja la inflación, con el ajuste fiscal y a quién perjudica ese proceso. La baja de inflación con ajuste fiscal y restricciones monetarias y cambiarias la pagaron los sectores empobrecidos con reducción sustancial de salarios y jubilaciones; el gasto social en salud y educación, con fuerte impacto en la sociedad, y también con la clausura de la inversión para obra pública y las transferencias a las provincias. Es un mensaje de campaña electoral con la intención de manipular a la opinión pública, cargando las tintas sobre la herencia y con una benévola lectura del presente de los precios, que muestran una tendencia creciente luego del piso de mayo (1,5%) que ascendió a 1,6% en junio y probablemente en alza en julio y más aún en agosto con la modificación del tipo de cambio de las últimas semanas, devaluando la moneda local en un 14/15%. La inflación interanual enunciada por Milei no se corresponde con la información oficial del INDEC, ni tampoco el guarismo actual. Pobreza e ingresos populares Es una visión edulcorada de la realidad que le permite señalar: “Sacamos de la pobreza a más de 12 millones de personas de los cuales más de 2,5 millones son jóvenes y la indigencia pasó del 20,2% al 7,3%, es decir, que cerca de 6 millones de personas que no les alcanzaban para comer, hoy comen.” Aseveración complementada con el dato relativo a que “los salarios privados le vienen ganando sistemáticamente a la inflación desde el mes de abril del año pasado.” Al respecto, los datos remiten para una base 100 a diciembre del 2023, que el salario del sector privado a mayo 2025, último dato disponible, se disminuyó en 8 puntos, es decir, a un registro de 92. Es cierto que a marzo 2024 había bajado a 86 y desde abril de ese año inició una recuperación con un máximo de 93 para noviembre del 2024 y luego se estanca al nivel actual de 92. No hay mejora de los salarios del sector privado, aun sin recuperar la pérdida desde la asunción de Milei. El mensaje presidencial nada dice de la pérdida salarial de los trabajadores en situación irregular, ni de los estatales o jubiladas y jubilados. Son sectores asalariados y perceptores de ingresos fijos que pierden contra los precios, aun con una inflación con tendencia a la baja. Ajuste, gasto y deuda Toda la argumentación presentada se hace para sustentar otra falacia, la del gasto y el impacto que supone la asignación presupuestaria definida por la legislación aprobada en materia de salud, discapacidad, jubilaciones entre otras. Dice el presidente libertario: “Los proyectos aprobados por el Congreso, si los sumamos todos —que incluyen reinstalar la moratoria previsional, aumentar el salario de docentes y las pensiones por discapacidad, entre otros—, representan un gasto anualizado de prácticamente 2,5% del PBI” y agrega: “…implicaría un endeudamiento adicional de más de 300.000 millones de dólares…” Alarma con las cifras, muy alejadas de la realidad. Si el PBI aproximado del 2024 fue equivalente a 625.000 millones de dólares, el 2,5% alcanzaría los 15.625 millones dólares, lejos del incremento de deuda mencionado, equivalente al 48% del PBI. Una gran exageración. Son falacias en el discurso presidencial que intervienen en la disputa del consenso electoral, ratificando su base de votación del 30% en la primera vuelta del 2023, y con pretensión de alcanzar una votación en octubre próximo en torno al 40%. De ese modo, pretende ratificar el rumbo del gobierno de la ultraderecha. Pese al mensaje de “equilibrio fiscal y fin de la emisión monetaria”, la realidad es la continuidad asociada al endeudamiento, agravando la hipoteca sobre el conjunto de la sociedad. Debate teórico El mensaje de Milei nos trae un debate teórico sobre la formación de los precios, insistiendo en su conocida formulación “la inflación es siempre y en todo lugar un fenómeno monetario”, por lo que afirmó que: “la única relación causal que existe es desde la cantidad de dinero hacia el nivel de precios”. Se trata de una discusión que inicia con los “clásicos” de la Economía Política y la ley del valor trabajo, resignificada con la crítica de Karl Marx y su propia teoría del valor. Con Marx y su teoría del valor se explicita el origen del excedente: la plusvalía. Los precios deben explicarse entonces, desde la producción de valor y plusvalor. O sea, desde la explotación, e incluso por la competencia por la apropiación de cuotas de plusvalor, y no por la moneda o la circulación, base de sustentación de la teoría subjetiva del valor asumida por los monetaristas. No es el Dinero a los Precios, sino desde el Valor a los Precios. Desde la Producción y no desde la Circulación. Son enfoques contrapuestos con los que los neoclásicos y los monetaristas ocultan el fenómeno de la explotación. Desde los dichos por el libertario presidente se puede explicar la “razón” del ajuste vía reaccionarias reformas laborales, previsionales o tributarias, en curso y en perspectiva. No le preocupa a Milei bajar o anular retenciones, aunque eso perjudique el equilibrio de las cuentas fiscales. El ajuste no se piensa por ahí, ni eliminando intereses de una deuda odiosa e ilegal, sino disminuyendo gasto social orientado a la mayoría de la población. Para combatir la inflación se necesita discutir el modelo productivo, el estímulo a la investigación científico tecnológica para intervenir sobre la productividad del trabajo. Es algo a contramano de la apuesta al ingreso de inversiones externas para la explotación y saqueo vía exportaciones de los bienes comunes locales y una estructura empresarial al servicio de esa lógica de extranjerización y subordinación dependiente. Debates ausentes y pendientes La crítica presidencial al poder legislativo por asignación de gastos puede revertirse hacia el poder ejecutivo que funciona sin ley de Presupuesto, ya por dos años, por incumplimiento de la Constitución que remite al Congreso Nacional la sanción de un presupuesto Nacional. Es en esa legislación en donde se puede considerar el destino del gasto y el origen de los ingresos fiscales. Discutir el modelo productivo y el presupuesto debiera ser un debate participativo que involucre, más allá de los poderes del Estado, al conjunto de la población. Buenos Aires, 11 de agosto de 2025

Minería y transnacionalización en Argentina

UNA PRIMERA VERSIÓN DE ESTA NOTA SE PUBLICÓ EN EL Diario argentino Página12: https://www.pagina12.com.ar/847941-anuncios-de-inversiones-externas-en-mineria Avanza el proyecto minero con inversión externa Por Julio C. Gambina Por estas horas se anunció la mega inversión minera en San Juan por parte de BHP y Lundin Mining, en el marco de las facilidades del RIGI. Se trata de una inversión de 15.000 a 17.000 millones de dólares para la explotación de cobre. Es un proyecto que lleva dos décadas en exploración en los proyectos “José María” y “Filo del Sol”. El joint venture que formaron la canadiense Lundin Mining (exploradora y descubridora de ambos proyectos) junto con una de las mineras más grande del mundo, la australiana BHP, ahora se denomina Vicuña Project. Aunque genera expectativas, no es una inversión, ni fuente de divisas inmediata. Iniciada la actividad, si se aprueba, luego de la inversión inicial se espera producción para la exportación de 1.500 a 2.000 millones de dólares anuales en los primeros años. Resulta evidente que el Régimen de Incentivos a Grandes Inversiones, el RIGI, facilita estas inversiones. Argentina ha buscado, desde los 90, pasar de ser un territorio con minería a constituirse en un país minero, con San Juan a la vanguardia en la promoción de la mega minería a cielo abierto. La realidad sanjuanina es que actualmente hay una sola mina en explotación: Veladero, la mina más grande de Argentina en oro y plata. El resto son proyectos en exploración en sus distintas etapas, (prospección, avanzada, pre factibilidad, factibilidad y construcción) avanzada, incipiente, caso de “José María”, en una etapa de construcción y “Filo del Sol” en etapa de factibilidad. Puede estimarse el inicio de la producción de José María sería para unos 5 años como mínimo. Hay que estimar unos 4 años en construir la mina y por ahora lo único que construyeron es el campamento, que albergará a los obreros que van a realizar la construcción. Hasta que haya producción y ganancias falta, calculando que para el proyecto Vicuña, unos 10 años. Es que tienen que construir dos plantas de procesamiento ya que son sistemas geológicos distintos. Filo del Sol es de alta sulfuración (mayor acidez) con un pórfido en profundidad; en cambio José María es un pórfido clásico. Se trata de diferencias en la metalogénesis, el proceso geológico por el cual se forman depósitos minerales, especialmente yacimientos de metales. Es un tema vinculado con la evolución de la corteza terrestre, la tectónica de placas y procesos hidrotermales. La metalogénesis describe cómo los metales se concentran y se depositan en la corteza terrestre para formar yacimientos que pueden ser explotados económicamente. Por eso es imposible que el mineral se trate en una misma planta. Para Filo del Sol falta aún más. Se trata de una inversión a largo plazo y las regalías son apenas el 3% de la declaración jurada de la producción en boca de mina. En ese sentido, hay que ponderar el anuncio de inversión actual, con su realización y desarrollo. San Juan está en proceso de convertirse en una provincia minera, ya que por ahora solo hay exploración y apenas Veladero en producción. Claro que se viene anunciando la reactivación del proyecto Casposo para el último trimestre del año, tratando el mineral de Hualilan, una mina antigua. Existe un boom de exploración pensando en una matriz productiva a largo plazo. Vale considerar que, así como algunas empresas transnacionales se retiran del país, otras ven oportunidades en un modelo primario exportador a partir de la explotación de los bienes comunes, en la convicción que ya no hay lugar para la continuidad centrada en un país de industrias locales orientadas al mercado interno. Lo anunciado oportunamente por Milei es un país receptor de grandes inversores asociados a la explotación de los bienes comunes, en el agro, la energía o la minería, y en todo caso un empresariado local para prestar servicios a esas inversiones. En rigor, los proveedores locales abren el paraguas y demandan legislación específica para ser parte del negocio. Con el argumento socialmente aceptado de la contratación de fuerza laboral local presionan para un marco legal actualizado que los incluya. Si bien se trata de una inversión extranjera, se demanda un lugar para la provisión de bienes y servicios locales a ofrecer por el capital radicado en la provincia cuyana. La consolidación de estas inversiones dependerá de la estabilidad política y económica del rumbo que sugiere el gobierno libertario, lo que se procesa en las elecciones de medio término en 2025 y en la renovación presidencial del 2027. Para estimular la inversión y endulzar a otros inversores, con fecha 7 de agosto se publicó en el boletín oficial la eliminación de las retenciones a la minería, con explícita intención de promover y estimular las exportaciones de cobre. Ya era irrisorio el 3% de ingreso fiscal por regalías de la explotación minera, según declaración jurada de las empresas, y ahora se eliminan derechos de exportación, en un rumbo que ya se había iniciado con las exportaciones d eoro ni bien asumido el gobierno libertario. La intencionalidad es atraer más inversión externa y agravar la dependencia en el marco de un modelo productivo y de desarrollo primario exportador. País minero El emprendimiento difundido remite a una inversión externa de un “joint venture” construido entre la empresa BHP, australiana y Lundin Mining, canadiense. Aún resta la aprobación de la presentación que finalmente se realice en el marco del RIGI, para lo cual habrá que actualizar los estudios de impacto ambiental. Existen muchas expectativas en el gobierno nacional y en el de San Juan, por el ingreso de divisas, la promoción de empleo y el impacto en la producción, la exportación y la generación de divisas. Analizan en la provincia sanjuanina una legislación favorable a los proveedores locales, mientras los inversores pretenden aportar sus propios proveedores transnacionales. Existen conflictos actuales al respecto, derivados de la contratación de proveedores chilenos para Filo del Sol, ya que es un proyecto binacional. La polémica proviene del sindicalismo, con impacto en el gobierno provincial, reclamando que la mano de obra y los prestadores de servicios sean locales. La inversión se asienta, como dijimos, en dos proyectos que hace dos décadas se vienen explorando: José María y Filo del Sol, esta binacional, ya que la última actualización de recursos establece que el 30% se encuentra en lado chileno. Ambos localizados en la cordillera sanjuanina, una provincia que en los últimos años pretende convertirse en un territorio productor y exportador de minerales, principalmente, de oro y plata. Chile y sus 50.000 millones de dólares anuales de exportación están en la mira. Argentina corre desde muy atrás, apenas con el 10%. La inversión rendirá en el mediano plazo, de 3 a 5 años de iniciada la explotación, con una producción para la exportación con expectativas de crecimiento en el tiempo de vida útil de los yacimientos. Como fuente de ingreso de divisas no es inmediato, sea porque la inversión requiere de su aprobación y un programa de desembolso. La expectativa está en la generación de empleo, ya que, si se aprueba el proyecto, el desembolso se orienta en origen en ocupación laboral para la construcción. No hay expectativa de generación de divisas producto de la exportación, ya que eso ocurrirá en el largo plazo. La experiencia reciente en los hidrocarburos no convencionales muestra que primero se requiere la inversión en infraestructura para poder explotar, distribuir y obtener ganancias. El RIGI aparece ahora como oportunidad para presentar la inversión, consolidando el modelo productivo que la Argentina viene sustentando desde la década del 90 para convertirse en un país minero. Por eso se cambió durante los 90 la legislación del régimen minero, que el sector minero demanda actualizar. Se argumenta que es una legislación pensada para la explotación y no para la etapa previa en proceso actual. La provincia de San Juan viene creciendo su capacidad productiva con base en este modelo asociado a la mega minería a cielo abierto, cuestionada por el movimiento social en defensa del medio ambiente y los bienes comunes. Distinta es la situación en la vecina Mendoza, o en otras provincias cordilleranas, por restricciones gestadas por las protestas sociales en defensa del medio ambiente, del agua y de los bienes comunes. Hace tres décadas que los gobiernos de Argentina promueven la mega minería a cielo abierto. No es una novedad del gobierno actual. La oportunidad del RIGI y el rumbo liberalizador a ultranza en la actualidad estimula las expectativas de grandes inversores, siempre que se consolide el rumbo, lo que requiere el disciplinamiento de la protesta social e incluso de la burguesía local que mantiene su imaginario industrializador. Pensar alternativas La sociedad está en deuda con el debate sobre un modelo productivo y de desarrollo alternativo, no solo respecto de la minería, sino sobre el conjunto de la actividad productiva y de servicios en el país. En la primera década del siglo XXI se discutió la política económica en procesos de cambio económico, especialmente remito al caso boliviano, que rediscutió los contratos petroleros para invertir la ecuación de apropiación de la renta petrolera. Muchos auguraron que las transnacionales se retirarían del mercado. Eso no ocurrió y el Estado plurinacional pudo utilizar una gigantesca cuota de renta petrolera para una política de distribución del ingreso. Claro que no alcanza con la mejora fiscal, ya que una discusión especial remite a la afectación sobre la naturaleza, pero son temas inescindibles en una polémica ausente que el país necesita. De hecho, se requiere discutir qué producir, como hacerlo y para quien, incluso que inserción internacional. Es un debate más allá de la minería, que supone específicamente pensar en exploración y explotación alternativa en materia de minería. La lógica oficial solo se mide en términos de crecimiento del PBI, de las inversiones, las exportaciones y la captura de divisas para profundizar un rumbo de extranjerización e inserción subordinada del país en la dinámica actual de acumulación del capitalismo. Resulta imprescindible habilitar un debate para un rumbo alternativo, a favor de la sociedad y en defensa de los bienes comunes. Buenos Aires, 7 de agosto de 2025

Más deuda para sostener el ajuste

Crece la deuda pública con un nuevo desembolso del FMI por 2.000 millones de dólares, luego de tensiones cambiarias que supusieron un aumento del tipo de cambio del 15% en el mes de julio contra una inflación en torno al 2% mensual. Eso explica la corrección de variados precios que dificultan la aspiración gubernamental de bajar la inflación. Por eso se acude a un mayor nivel de contención del nivel de actividad económica, con desempleos y baja del consumo popular. Al mismo tiempo se publicó el veto a leyes de actualización de jubilaciones, la moratoria previsional y la emergencia por discapacidad, en simultáneo con la reducción de retenciones a las exportaciones agropecuarias. Trump sostiene a Milei La coyuntura muestra el apoyo al gobierno Milei de EEUU vía FMI e identifica a los grandes productores y exportadores como beneficiarios privilegiados de la política económica. Crece la hipoteca de la deuda, la que se descarga sobre el conjunto de la sociedad, convalidando una tendencia estructural al empobrecimiento. El stock de reservas internacionales alcanza unos 42.700 millones de dólares, principalmente por los desembolsos del FMI, de 12.000 millones a mediados de abril y ahora otros 2.000, a los que sumarán otros 6.000 para completar el préstamo de 20.000 millones otorgado en abril pasado. Sin los aportes del FMI sería imposible sostener la política oficial, que no puede retener el superávit comercial, que viene en descenso por el aumento de las importaciones. El problema es la fuga de capitales, sea por pago de deuda, acumulación de activos externos del sector privado o por salidas de divisas por el turismo emisivo al exterior. Así puede explicarse que no haya acumulación “genuina” de reservas internacionales, salvo por mayor endeudamiento. La solución es el auxilio del organismo internacional sustentado por la gestión Trump, que, así como sostiene a Milei con el préstamo en abril, desató al mismo tiempo la guerra arancelaria que pese a los anuncios de acuerdos arribados con variados países, aún está en proceso y con impacto de “incertidumbre” según señala el informe de julio 2025 sobre la actualización de las perspectivas económicas mundiales del FMI. Una incertidumbre que también impacta en el país. El FMI desembolsó 2.000 millones de dólares y anunció que la auditoria pasa de tres a seis meses, con lo cual, el próximo informe sobre la evolución de las cuentas locales del segundo semestre, recién se conocerá para fines del primer trimestre del 2026. Para esa fecha ya habrá nueva composición del Congreso Nacional, surgido de las elecciones de octubre 2025. La apuesta oficialista y del poder es una mejora de las mayorías parlamentarias que les permita avanzar en las reaccionarias reformas estructurales: laboral, previsional e impositiva. Todas destinadas a mejorar la rentabilidad del capital. Baja de la actividad económica Pese al informe laudatorio del FMI y al discurso oficial relativo a crecimiento del PBI y reducción del índice de inflación y de pobreza, la realidad devuelve el cierre de empresas, el crecimiento del desempleo, el aumento de las tasas de interés y por ende del costo financiero, todo lo que incide en la contención del consumo popular. La realidad devuelve desconformidad con el rumbo, pero no necesariamente se transforma en protesta social, aun cuando crecen los reclamos y paros, caso de los/as trabajadores/as del subterráneo de Buenos Aires o la continuidad de reclamos de los/as estatales o jubiladas/jubilados. Un dato relevante es el crecimiento del ausentismo en las elecciones realizadas hasta ahora en distintas provincias, que pueden repetirse hacia septiembre en la elección bonaerense y en octubre en la nacional. Es una señal preocupante para el gobierno que enfatiza su rumbo privilegiando el combate a la inflación con sus anclas fiscales y monetarias, que se manifiestan en domar los ingresos populares, especialmente salarios y jubilaciones, tanto como contener el tipo de cambio, recreando mecanismos de rentabilidad en moneda local. Más allá de la desconformidad y de la protesta, resulta imprescindible el surgimiento de una propuesta política alternativa que entusiasme a buena parte de la sociedad, para revertir las reformas avanzadas en esta primera parte del gobierno Milei. Desde ahí será posible reconstruir una propuesta de organización económico social que privilegie a los sectores mayoritarios, hoy desfavorecidos por el ajuste. Buenos Aires, 4 de agosto de 2025