Es obvio, ya que se trata de una iniciativa sustentada en demandas sociales, sindicales, económicas y políticas de los trabajadores.
Queda claro que los espacios sociales, sindicales y políticos que adhieren a la propuesta gubernamental no aceptan ni motorizan la medida de fuerza, aún cuando las demandas atraviesan las necesidades del conjunto de los trabajadores.
Entre varios motivos para el PARO se privilegia una crítica al estilo impuesto en negociaciones paritarias condicionadas por la presión empresaria y gubernamental, identificada en cierres rápidos y a última hora con valores menores a la inflación real del 2013. Es una situación que no permite ajustes salariales que acompañen el encarecimiento del costo de vida por aumento de los precios; mucho menos si se proyecta anualmente la inflación entre enero y marzo del 2014. Vale mencionar además, que varios organizaciones sindicales estatales no tienen paritaria, o no participan de ellas por las condiciones discriminatorias del régimen legal para el reconocimiento de los sindicatos. En este sentido, pesa el reclamo por democracia y libertad sindical con proyectos presentados al debate en el Parlamento.
Ante el encarecimiento del costo de vida se sustenta en el PARO un Salario Mínimo Vital y Móvil de $9.000; al que se asocia el reclamo por la jubilación mínima y una actualización del 82% móvil. Vale recordar que el salario mínimo está en $3.600 y la jubilación mínima en $2.757, ambos valores muy lejos de satisfacer las necesidades de sus perceptores. Incluso, el salario promedio de la Argentina está muy lejos del mínimo necesario para reponer el gasto de energía física y mental del trabajador y su familia que supone la actividad laboral cotidiana.
Uno de los aspectos que más irrita a los trabajadores, por inconstitucional es ser sujetos de impuestos a las ganancias. Por definición el salario es la retribución al factor de la producción "trabajo", mientras que la retribución al capital es la ganancia. El reclamo es por eliminar del impuesto a las ganancias los ingresos salariales. Algunos sostienen esa concepción aunque admiten en la coyuntura una actualización del mínimo no imponible para defender el ingreso de los trabajadores y que los ajustes y actualizaciones de salarios no sean apropiados por el fisco. Son medidas que apuntan a una reforma impositiva que debe incluir la eliminación de las exenciones a las rentas financieras.
Las reivindicaciones son variadas e incluyen las actualizaciones y universalización de las asignaciones familiares; el aumento para jubilados de emergencia y el 82% móvil de los ingresos previsionales; la prohibición de suspensiones y despidos; contra la legislación de riesgos del trabajo y contra la precarización laboral y las tercerizaciones, lamentablemente generalizadas y que afectan a la mayoría de los trabajadores. Sobre 15 millones de población económicamente activa, la mitad tiene problemas por irregularidad en el empleo.
Existen demandas de corte más general y claramente políticas, como la lucha por la derogación de la legislación antiterrorista y la criminalización de la protesta social, mediante la cual 7.000 dirigentes sociales están procesados en el país. En ese marco se lucha por la libertad de los presos, especialmente a los trabajadores petroleros de Las Heras condenados a cadena perpetua.
El paro es expresión del descontento y más allá de quién lo convoca, facilita el agrupamiento de activos sociales militantes que intentan construir alternativa política. Diversos agrupamientos se suman con todas las consignas o algunas, y muchos incluso en forma individual, adhieren desde el descontento que suponen las políticas de ajuste derivadas de la devaluación, los recurrentes pagos de la deuda pública, el aumento de precios y tarifas, los recortes a las actualizaciones salariales.
Hay quienes prefieren la fidelidad política al proyecto del gobierno y rechazan las motivaciones del paro general. Es una opción de subordinación que los aleja del compromiso con las demandas y necesidades de los trabajadores. Es parte de la opción que se asume individual y colectivamente en el camino de la subordinación o la emancipación social.
Buenos Aires, 9 de abril del 2014
ResponderEliminarCualquier trabajador más o menos conciente de serlo,puede negar el derecho, y aun más su deber de defender-por lo menos-su salario.
El unico problema de este paro, es la confución popular sobre el mismo.
Responsabilidad escencial de la mayoria de la "dirigencia"gremial,
Negar nuestras debilidades- creo-no ayuda el superarlas,el mas allá de quien convoca,es positivo,
Pero quien convoca tambien lo es.
La fidelidad politica al proyecto del gobierno,muestra hasta donde se cree que es posible "llegar".
para algunos negarse a lo imposible y tratar de que fuera posible pero, para otros esto es
a donde quieren llegar.
Disculpas Julio,pero mi inquietud es aquella aberracion, de que el enemigo de mi enemigo es mi .....
les trajo a los trabajadores el confundirse sobre todo de su solaridad mundial frente al capital
hace 100años,si no la rescatamos de alguna forma,dificil sera el camino.
Los barrionuevo son elementos indispensables,pero no justamente para ello.Es muy posible, es más es probable que aquellos que estan momentaneamente enfrentados a nos vuevan a estar de vuelta pero es casi imposible que algunos convocantes alguna ves lo esten.
Algunos se "confundieron" en su momento y vieron en la S.Rural a su amigo.No aprovechamos la jugosa
polemica sobre periodismo "independiente" y periodismo "militante" aclarando por un lado que los periodistas son trabajadores y como tal no pueden decir lo que piensan, sino lo que su empleador quiere y que el "militar" nunca es por un sueldo o mejor dicho por el sueldo, sino que por sus ideas,cual seria el motivo, quizas equivocadamente, por que cremos poder utilizar los medios y la historia nos dice que nos utilizan a nosotros.Dejar de utilizarlos NO, no volverse complices solamente.
Como el camino es largo y no creo que como algunos tienen Fe, en una "emancipacion" espontanea,sera con la mayor conciencia posible dentro de esta sociedad que "espontaneamente" la cambiemos.
La nota esquiva flagrantemente la discusión del poder y las relaciones de fuerza. En un tipo como Gambina, que tradiconalmente lo tomo con pinzas pero que me resulta lúcido es imperdonable. Porque sabe lo que dice.
ResponderEliminarNo alcanza con hacer un listado de síntomas de la situación económica olvidando de que es la derecha la que quiere voltear a al Gobierno, que la situción internacional es complicadísima y que la sociedad no esta pidiendo, precisamente, la Rev. Bolchevique sino una vuelta al menemismo: pide dólares, libertad de empresa, mano dura, facilitación de negocios, baja de retenciones agropecuarias, y un largo etcétera.
La izquierda que va al paro es la típica izquierda cipaya que tenemos. Que si vinieran los ingleses a invadirnos con el resto de la OTAN, dirían "esta es una pelea inter-burguesa, poro para que el Gobierno nos escuche vamos a apoyar a la OTAN".
PD: Espero que la gente como Ud. de la cara cuando se termine este proyecto político a manos de una oposición organizada desde el Pentágono como es evidente.
Motivos para parar y luchar sobran. De acuerdo. Motivos para no encolumnarse tras los burócratas corruptos también. Ni los menciona el artículo. Negando no se construye. No existe alternativa dentro de la clase trabajadora, alternativa sindical clasista, no existe. El paro, que es para los sectores militantes un dia de lucha, queda entrampado en lo más general, en una oposición al gobierno, dentro del sistema. Los afiches de CGT mencionan como primer reivindicación del paro la seguridad, luego el ajuste. No lo veo. La clase obrera no va adquirir conciencia si sigue a la burocracia. Alemania 1933: el Partido Comunista fue perdiendo afiliados y los ganó el Partido Nazi. La clase obrera no es revolucionaria si no toma conciencia.
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ResponderEliminarCreo que tu intención que se escriban comentarios,se debe a la intención de que se pregunte,se digan las dudas,e incluso los comentarios enfrentados,que contengan o no argumentos validos, nos ayuden, por un lado que y como se piensa, y que nos provoque dudas o nos fortalesca en nuestras convicciones.
Comparto en gran parte con M.D.,pero me preocupa en especial, aquello del enemigo de mi....
El sr A.nos dice la derecha quiere
voltear al gobierno,seria bueno que espesificara que parte de ella
fundamentalmente,y nos dice, que la Sociedad, pide:dolares,mano dura,baja de retenciones etc.
Creo que no estamos pidiendo casualmente eso, y si la sociedad dice,termine este proyecto politico
Por que ese pesimismo,que "cosas mal" abra realizado el gobierno para que se termine el mismo.
Y con sinceridad lo maximo que entendi de su comentario,reconocer que hay un pentagono, me imagino como hay un Londres, un Berlin etc,
se refiere a esa pelea interburguesa,reconosco que se le dice izquierda (en EEUU a Obama) a cualquiera, que esta dividida, confundida,y continua siendo sectaria (el principal dirigente de una izquierda nos dice "somos los unicos marxistas" sic)pero amigo,recoger el viejo mote del intelectual radical forjista Jaureche de ,Cipayo,es de epocas de la guerra fria,muy macartista.
Pero sabe que, se puede percibir en su comenatrio, que tenemos algunos enemigos comunes,lo cual automaticamente no nos hace amigos
pero si que podemos caminar juntos un trecho del camino y quien sabe
alguno de nosotros en ese trayecto podemos modificar nuestras diferencias y acercarnos en nuestas posiciones.
Pues existe alternativa para derrotar a los burocratas, claro si la clase obrera toma comciencia de ello,y nuestro camino debera ser ese,los gobiernos son una Mediación de intereses, y fueron medianamente buenos cuando mediaban entre burgueses,pero los laburantes se metieron,y a crear formas ideologicas que nos creamos que en la "puja de intereses" que es la modesta versión de la antigua, lucha de clases, de que lado esta mediando,no puede, hay que reconocer hacer otra cosa que
aumentar la cuota de ganacia de los empresarios, bajando salarios.
Para resistir los esfuersos del pentagono, se deberia movilizar al pueblo,y no con retoricas mediaticas,el voto sirve para delegar,pero para sostener no hay manera alguna que con participación popular.
Haa anonimo, el partido nazi,nunca fue mayoria,aun recibiendo los votos de la derecha asustada solo alcaso un tercio, fue un puch.casualmente
apesar de los errores de la izquierda.Despues de ello es otra historia.